Es muy útil saber qué tipo de madera tenemos de manera muy asequible en el mercado para simplemente, saber qué es lo que estamos comprando y conocer las diferentes propiedades que tienen para elegir una u otra.
Te vamos a contar cómo identificar los diferentes tipos de madera fácilmente
Las maderas más habituales se dividen en tres grupos:
- Coníferas: abeto y pino.
- Frondosas: roble, castaño, encina, eucalipto, nogal, haya y cedro.
- Tropicales: balsa, elondo, ipé, iroko, palisandro y teca.
Madera de Coníferas: las especies más comunes que te encontrarás de coníferas son: pino silvestre, pino Oregón y el abeto.
Estas maderas son resinosas, blandas, con los anillos anuales marcados y son de color pálido suave y uniforme.
La madera de conífera puede ser impregnada muy fácilmente pero las resinas, aceites esenciales y los taninos pueden contaminar la superficie y hacer más difícil la adherencia de los barnices o los lasures que utilices. Además, son maderas de menor calidad y por consiguiente, más económicas.
Madera de Frondosas: son llamadas también latifolias, son maderas duras, tienen una estructura leñosa más compleja que la de las coníferas con vasos y fibras. Los colores son muy variados desde pálidos al marrón oscuro.
Normalmente, son maderas densas, poco porosas por lo que son muy difíciles de impregnar. Contienen extractos como los glúcidos y algunas especies como el roble y el castaño son muy ricas en taninos que pueden generar manchas grises o negras en el acabado si no se eliminan usando un fondo antitaninos.
Maderas Tropicales: existe en el mercado una gran variedad de especies de tres orígenes diferentes:
- África (iroko, elondo, dussié…)
- Sudamérica (ipé, palisandro, balsa…)
- Asia (teca)
En España encontrarás principalmente iroko, elondo, ipé y teca.
Las maderas tropicales son muy características. Tienen una estructura interna parecida a la de las frondosas y son muy poco porosas. La gama de color es más oscura que las coníferas y frondosas.
Son maderas muy sensibles a los rayos solares, poco impregnables, muy resistentes y ricas en extractos, exudados y taninos, que pueden dar problemas al aplicar productos para el mantenimiento. Además, poseen una gran dureza y densidad.